Macabro descubrimiento. Tras el incendio de una choza rústica, es decir una vivienda provisional construida con madera, cartón y láminas, debajo del puente del Segundo Piso de la autopista México-Puebla en el retorno de San Felipe Hueyotlipan, la madrugada del lunes pasado; se encontraron a dos hombres ensangrentados.
Solo que uno ya estaba muerto y el otro grave. Ambos no murieron por el incendio, es decir no tenían ni quemaduras ni señas de que se hayan intoxicado por inhalar humo.
El que estaba sin vida en el punto, tenía varias heridas por arma blanca en el pecho y estómago. Quedó en calidad de desconocido, de entre 50 a 55 años de edad.
El herido, con múltiples golpes en el rostro y cabeza, alcanzó a mencionar que se llamaba Miguel Ángel G. R., de 24 años de edad y vivir en la colonia Pinos del Sur. De urgencia fue llevado al hospital de Traumatología y Ortopedia del Sector Salud, por técnicos en urgencias médicas que acudieron al auxilio. Sin embargo, por la brutal golpiza que recibió, horas más tarde pereció.
Así, aunque inicialmente todo pudo haber pasado como un doble deceso por el incendio de la vivienda hechiza; se logró descubrir un doble asesinato.
Ahora tocará a la Fiscalía General del Estado a través de su personal de la Coordinación General Especializada en la Investigación de Homicidios Dolosos a cargo de Odette Alejandra Flores Ventura, de esclarecer el sonado caso.
Amén de que los familiares, al menos de Miguel Ángel, descartaron que fuera indigente. Otro punto a investigar o que pudiera servir para las autoridades ministeriales es que precisamente en esa zona es un foco rojo de inseguridad por los constantes asaltos a transeúntes que a diario pasan por la zona para irse a sus centros de trabajo.
